Se desperdician miles de litros de agua en el parque termal de Oberá

Sábado 26 de julio de 2014
Miles de litros de agua se escurren y pierden por día en el parque termal  de esta ciudad debido a la falta de infraestructura para reutilizar el desecho de las tres piletas del predio. Se trata de un volumen considerable que podría ser derivado a la planta de potabilización y volcado a la red local, en déficit debido a la crisis hídrica.   
La perforación del Acuífero Guaraní aporta entre 80 y 90 mil litros por hora, de lo cual el 15 por ciento se destina a las piscinas del complejo Termas de la Selva. En tanto, el mayor volumen se incorpora a la red a través de un acueducto hacia la planta potabilizadora. 
Federico Weyreuter, presidente de la Cooperativa Eléctrica Limitada de Oberá (Celo), explicó que desde la inauguración del complejo Termas de la Selva el desecho de las piscinas se utilizaba para riego y limpieza del predio.
El agua de las piletas también podría ser volcada a la red, aunque al disponer de un solo acueducto se debería contar con un equipo de bombeo y potabilización.
“Al finalizar la jornada, se limpian las piletas y se desagotan. En un momento iba a un piletón que tenía un plástico como cobertura de superficie, pero se ve que el espesor era muy débil, se fue resquebrajando en las paredes laterales. Por eso, hace tres o cuatro meses se dejó de utilizar el piletón y el desagote va hacia la parte baja del terreno”, reconoció Weyreuter.
Precisó que en verano el agua de las piletas se mantiene en temperatura por más horas, pero en invierno se requiere renovar constantemente el vital líquido para sostener las propiedades, por lo que se pierde un mayor volumen.
“El sistema tiene termostatos y automáticamente, cuando baja la temperatura, funciona un equipo de bombeo de la red que realimenta las piletas. Por eso en invierno tenemos que desagotar dos o tres veces por día”, agregó.
El titular de la Celo comentó la necesidad de solucionar cuanto antes el problema del piletón en superficie para aprovechar el desecho de las piletas en el riego y limpieza del predio de ocho hectáreas.

Crisis hídrica
A partir de una ordenanza de 2009 ratificada en 2012, la comuna obereña se encuentra en emergencia hídrica permanente debido a la disminución del caudal del arroyo Ramón, principal curso que provee a la red de agua potable local.
La recomendación básica para los habitantes es el uso racional del vital líquido, por lo que llama la atención el desperdicio que a diario se realiza en el predio termal por falta de infraestructura adecuada. Precisamente, el pedido de emergencia hídrica fue solicitado por la Celo.
La ordenanza aprobada faculta al Ejecutivo “a adoptar todas las medidas económico-legales tendientes a asegurar la racionalización, uso y suministro de agua potable, como también en cursos naturales”.
Además, habilita a dictar normas que impongan sanciones económicas a quienes no respeten las medidas dispuestas.
En consecuencia, se debería sancionar a quienes derrochen el vital líquido proveniente de la red en tareas como lavado de veredas y vehículos, ya sean particulares o empresas.