Inversiones en refacciones son las opciones más recomendadas

Martes 16 de septiembre de 2014
Recursos de ahorristas pequeños. | Deberían concentrarse en la construcción, de acuerdo a la voz de los expertos. | Foto: Archivo
Con la finalidad de no perder el poder adquisitivo, los pequeños ahorristas deberían invertir en inmuebles, ya sea realizando construcciones o refacciones, inclusive adquiriendo terrenos. Ello con la finalidad de destinarlos a emprendimientos para alquileres de casas, departamentos o locales comerciales. Lo anterior emanó de un estudio denominado “Alternativas de inversión”, realizado por la empresa Servicios Gestiones Empresariales, a cargo de Daniel Ponce de León y de Lucas Benítez.
Se hicieron entrevistas dirigidas a profesionales de las Ciencias Económicas de Misiones en agosto a través de un trabajo de tipo cualitativo. En referencia a la fundamentación se esgrimió que “la necesidad de vivienda existe, por lo cual siempre es una buena inversión para los pequeños ahorristas. Ello por encima de sacar préstamos o incluso comprar autos en cuotas”.
La búsqueda y comparación de los precios de los productos para la construcción es otra de las metodologías que deberían practicar los ahorristas en el cambiante escenario argentino.
Mientras que a la hora de analizar las estrategias para superar la crisis se destacó que “como eje central se debería analizar y planificar el momento del gasto o de la inversión, comprando lo justo y lo preciso. Sin necesidad de endeudarse con tarjetas de crédito y préstamos financieros, teniendo en cuenta la situación actual del país. En estos momentos gran porcentaje de la población hipoteca su futuro, endeudándose a largo plazo en un creciente contexto inflacionario”.  Dentro del grupo de pequeños ahorristas se pensó incluir a las personas que disponen de un rango monetario a invertir ubicado entre los 500 y los 5.000 pesos mensuales.

Diversificación
“La inflación es el crecimiento continuo y generalizado de los precios de los bienes y servicios y factores productivos de una economía a lo largo del tiempo. En la práctica, la evolución de la inflación se mide por la variación del Índice de Precios al Consumidor (IPC). Para comprender ese  fenómeno, se debe distinguir entre aumentos generalizados de precios, que se producen de una vez y para siempre, de aquellos aumentos de precios que son persistentes en el tiempo”, de acuerdo a la definición del especialista Ramón Díaz Beltrán. Esos pensamientos están  esbozados en el artículo de investigación denominado “Inflación: definición, causas y efectos”, publicado por la Universidad Nacional de  Santiago del Estero. En el referido estudio de carácter científico se agrega que “por sus repercusiones directas en el nivel de vida de la población y en el funcionamiento de sus instituciones, la inflación está, junto con la desocupación de la fuerza laboral, entre los principales problemas macroeconómicos de corto plazo. Aunque sus efectos pueden perdurar en el tiempo. Por esa razón, se ubica en el centro de las preocupaciones y discusiones sobre la marcha de la economía, tanto por parte de los gobiernos, como de los agentes económicos y del público en general, trascendiendo al ámbito de lo político y mediático”.
Sobre el tema el contador público y asesor de empresas Raúl Karaben, explicó a El Territorio que hay pocas alternativas para que los consumidores o pequeños ahorristas enfrenten la devaluación e inflación en el país. Destacó evitar deudas y luego comparar más los precios recorriendo negocios. En resumen la meta es evitar quedarse con pesos, ya que su valor irá en descenso. “El problema que tiene la gente es que sus ingresos están todos en pesos. Y los sueldos son bastante inflexibles, ya que no se pueden acomodar tan rápido a la suba de precios. Ahora con respecto al consumo, las recomendaciones básicas serían no endeudarse con actualización. Si uno se puede endeudar con pesos en cuotas fijas, bueno perfecto, pero no en cuotas ajustables”, indicó el profesional universitario.
El especialista destacó que en este momento los créditos son “intomables. En los bancos las tasas de los créditos personales  (en algunos casos) están pasando el 80 por ciento anual de interés. Con esa tasa es imposible sacar un préstamo, menos en moneda extranjera porque no se puede saber lo que va a pasar en definitiva”.  
De su lado, el también especialista en Economía, Félix Piacentini, aseveró días pasados que “si se ahorran 500 pesos por mes, el dólar es una reserva de valor para el ahorrista pequeño o grande. Adquirir electrodomésticos con tarjeta de crédito y sin interés también es una buena alternativa. Si se ahorran 5.000 pesos por mes: el dólar continúa siendo una posibilidad interesante. Ahorrar más en vehículos medianos con gran potencial de reventa también representan una buena opción. Pero en primer orden yo pondría a la construcción y refacción de inmuebles, ya sea casas o departamentos”.
Mientras que a nivel nacional el economista Nicolás Litvinoff, destacó al diario Ámbito Financiero “si se ahorran 500 pesos por mes, con cuatro meses de ahorro una persona podría abrirse una cuenta en una sociedad de bolsa. Si se ahorran 5.000 pesos por mes, se puede invertir en acciones o bonos en dólares, el riesgo es muy bajo. Los ladrillos no deben descartarse de ninguna manera”.  

Consumo
Para el destino de los pequeños montos monetarios, Karaben recordó que la mejor alternativa sigue siendo adelantar consumos y evitar quedarse con el efectivo. “Si alguien tiene excedente de dinero lo que tiene que hacer es no quedarse en pesos, no ahorrar en pesos, anticipar gastos, comprar bienes durables, como por ejemplo, aceite harina, yerba, las cosas que se pueden guardar, de esa forma uno se aprovisiona y no hay afectación en el corto plazo”.
Además apuntó sobre las compras diarias: “la otra recomendación es recorrer. Estamos viviendo un proceso que se llama expectativa inflacionaria, en ese proceso lo que normalmente sucede es que hay muchos comerciantes, que ante la duda o ante el miedo, se ponen a pensar: ¿qué hacer? Aumentan desmedidamente los precios. Hay mucha gente que subió sus precios más allá de los costos que efectivamente tiene. Por eso una de las recomendaciones es comparar mucho los precios”.


El dato 80%
Es el interés anual, en promedio, de las tasas de créditos personales en los bancos.