Con la vista puesta en Roma

Martes 16 de septiembre de 2014
Cuando Marcia Sol Lukasievicz (20) era pequeña y recorría las calles de su pueblo natal, en su mente no ocupaba lugar el deseo de que su madre le comprara un helado o un juguete. Su imaginación jugaba con la idea de algún día ser la protagonista de las gigantografías y publicidades que adornaban el lugar.
Algunos años más tarde ese sueño se hizo realidad pero no en Misiones ni en ninguna otra ciudad o provincia del país. La bella modelo misionera oriunda de Aristóbulo del Valle puso su cuerpo y rostro a diversas campañas de la India y su imagen logró convertirse en un ícono en ese país.
Pero eso no es todo en la carrera de esta joven modelo. El pasado viernes se consagró como una de las finalistas -en segundo lugar- del certamen The Look of the Year, el evento más importante de la moda de alta costura en más de 50 países. Resta una instancia más, dado que hasta el momento sólo la ganadora viajará a Roma a la gran final que se realizará en la Via Veneto, en diciembre. Sin embargo, se quedó con el galardón de Top Model Argentina 2014,  representará al país por un año y tiene altas posibilidades de viajar, si es que los italianos piden por más modelos argentinas.
De este gran evento de la moda internacional surgieron y dieron sus primeros pasos Cindy Crawford, Natasha Stefanenko, Gisele Bündchen y Stephanie Seymour, sólo por nombrar a algunas de ellas.
Marcia llegó ayer a Posadas y dialogó con El Territorio antes de viajar a Buenos Aires donde se encuentra realizando campañas fotográficas y estudiando en la Escuela de Moda Argentina.

Trabajaste en la India, ¿cómo fue esa experiencia?
Me fui a la India en 2013 cuando tenía 18 años. El 3 de junio ya estaba allá y volví el 5 de noviembre. Estuve seis meses. Trabajo de modelo hace tres años y tuve la oportunidad de viajar a Buenos Aires y una agencia me seleccionó. Me propusieron ir a India y les dije que sí porque era una oportunidad. Firmé el contrato, hice el pasaporte, la visa y me fui.

¿Qué producciones hiciste para ese país?
Trabajé con marcas de jeans, sobre todo. Estuve siempre acompañando a hombres en ese caso. Hice un desfile Fashion Week que reúne a modelos de todo el mundo porque es un desfile muy importante. Estuve en la revista Vogue, fui tapa de varias revistas. Hice varios zaris que es la ropa típica del país.
Viajé a otras ciudades para hacer campañas como Ladakh, Bangalore, Kerala. La que más me encantó fue Ladakh, que era como un desierto pero había nieve en la punta de la montaña, el agua era celeste, transparente. Estuve catorce días allí.

¿Qué te produjo ver tu imagen por las calles de aquel país?
Me producía mucha emoción porque cuando era más chica, cuando pasaba por las calles, me decía ‘cómo me encantaría estar ahí, posando en una gigantografía”, y bueno, tuve la oportunidad de hacerlo en la India. Por supuesto que hoy en día quiero que pase eso en mi país, pasar, verme y decir: ‘qué lindo’.
En ese país por lo general las personas son morochas y tienen ojos marrones o negros. Ver ojos claros y piel blanca era impresionante para ellos. Me sacaban fotos, me quedaban mirando y me inhibían un poco, pero era lindo porque la gente de la India es muy amable y amistosa.

¿Cuándo te diste cuenta de que querías vivir del modelaje?
Desde que nací más o menos jugaba con las muñequitas y les hacía los vestidos. Me encantan las barbies y pienso que algún día me voy a hacer una barbie de como soy yo. A los 16 me presenté en un casting de Pancho Dotto que se hizo en San Vicente; quedé seleccionada. Después tuve desfiles en Misiones en los que fui reina provincial de la Flor, primera princesa nacional de la Orquídea. En Buenos Aires también hice otras campañas.

¿Quién es tu referente en el ambiente?
A mí no me gusta la farándula ni los chismes. Estoy en contra de todo eso. Me encanta ser una modelo tranquila. Siempre la tuve a Ingrid Grudke por una cuestión de que es misionera. Creo que lleva muy bien encaminada su carrera y yo como persona quiero dejar un bien para las otras chicas que quieran ser modelo en el futuro. No poner al modelaje como algo feo o algo malo para las chicas, que las madres confíen en que hay agencias buenas, que hay gente buena detrás de todo esto. Creo que cuanto más despacio vas, más podés aprender del ambiente.
También conocí hace unas semanas atrás en la Escuela de Moda Argentina en la que estoy estudiando modelaje profesional a Jimena Buttigliengo. Tuvimos una buena charla y me gustó como mujer y la tengo ahí, al lado de Ingrid.

¿Te parece un ambiente competitivo?
Al modelaje no lo tomo como una competencia pero sí la hay. Hay muchas chicas bellas, de todos los gustos, de muchos estilos, pero es el cliente el que termina eligiendo a la que quiere que represente su marca. Yo tuve la oportunidad de trabajar con muchas marcas de jeans, remeras, ropa interior, videoclips que hice en India, el trailer de una película. Creo que todas las chicas tienen algo que ofrecer.

¿Cuáles son tus proyectos para el futuro?
Mi sueño es llegar a la alta costura de la pasarela que tuve la oportunidad ahora con Look of the Year en el que quedé segunda como Top Model de Belleza representando por un año al país. Creo que eso me va a abrir más caminos y puertas para el futuro. Lo que me encantaría es la pasarela de alta costura y obviamente que me gustaría viajar a Roma, pero Dios tiene la última palabra. Así que estoy en la espera.
Me gustaría también poner una agencia de modelos y enseñar a las demás chicas, pero todavía soy muy chica. Me encantaría y además hay muchas personas que quieren que les dé clases ahora pero no puedo si yo no estoy nutrida de los conocimientos necesarios. Hice un curso de maquillaje y aprobé con un diez.

Currículum completo

Y el currículum de la misionera sigue. A principios de 2013 desfiló en Punta del Este, Uruguay para la revista Gente y este año fue una de las modelos que acompañó a los artistas a recibir la estatuilla en la entrega de los Premios Gardel, el pasado jueves 7 de septiembre en el Teatro Gran Rex. En su paso por la velada se fotografió junto a Abel Pintos.