Ciclos

Miércoles 30 de julio de 2014

La charla ocurre en una vereda de Posadas pero puede ser cualquier otro lugar de la provincia. El tema de la semana, o del mes salvo la etapa mundialista, es la compleja situación de la economía argentina, arrinconada por la decisión de un juez estadounidense y la amenaza de default. En el diálogo, uno de ellos se muestra preocupado por el país, por sus finanzas, por su familia, por el qué pasará después. El otro con más crisis encima -se le nota en las canas- trata de calmarlo. Le dice que no se preocupe, que ya pasamos por esto en 2002 y que tan mal no nos fue. Y que, de última, desde esa vereda de Posadas, tampoco se puede hacer nada para arreglar las cosas.  “No te angusties, cuidá tu salud”, le dice.
El tema del default está definitivamente instalado y probablemente esta conversación se repita en la mayoría de las casas del país. (Y en esto los argentinos somos monotemáticos: hablamos de fútbol o de economía).
Lo concreto es que se están viviendo horas de definiciones. Esta larga novela que empezó a principios del 2012 cuando un pequeño grupo de tenedores de bonos, que se negaron a entrar a los canjes de deuda ofrecidos por el Estado nacional, obtuvo un fallo del juez estadounidense Thomas Griesa que obliga al país a pagar. El plazo expira hoy justamente. Y ayer fue un día intenso de negociaciones en Nueva York (pág. 14).

La palabra que más sonó fue default. Y que, pase lo que pase, ya es parte del léxico nacional. Como en algún momento ocurrió con: hiperinflación, convertibilidad (1989/90) riesgo país, canasta de monedas, default (2001/2) y otras tantas, que se van renovando cada diez años. Como en ciclos, lamentablemente.

Roberto Maack
Jefe de Redacción
rmaack@elterritorio.com.ar