Alertaron sobre consumo de drogas en Villa Schuster

Lunes 21 de abril de 2014
Secuelas. | Las pastillas y el alcohol son un cóctel explosivo por las noches. | Foto: Daniel Villamea
Habitantes del barrio Schuster de esta localidad alertaron sobre el alto consumo de alcohol y pastillas entre menores que se juntan en la plaza por las noches, producen desmanes y generan temor en los vecinos.
Además, reclamaron la falta de mantenimiento de los terrenos baldíos que proliferan en la zona, con espacios verdes y propiedades privadas donde proliferan las malezas.
Una corta recorrida por la plaza alcanza para hallar envases de vino y blísteres de clonazepam, utilizados como materia prima para un cóctel que genera descontrol y destrozos en las madrugadas.
“La plaza está destrozada, rompieron los bancos y los juegos, y no les podés decir nada porque te insultan y después toman represalias. En mi caso, tiraron pintura en el frente de mi casa y tiran piedras en el techo. Es un grupito del barrio que se junta con otros de Villa Torneus y ya no sabemos qué hacer”, comentó Fernando Villalba.
Indignado por la situación, lamentó que “mis hijos y amiguitos no pueden ir solos a la plaza porque están esos grandotes que se las dan de patoteros. Aparte rompieron los juegos y hasta los bancos de cemento. Son incontrolables”.
Por las noches los menores se juntan en el centro de la plaza para cobrar peaje y molestar a las mujeres que pasan por el lugar. “En cualquier momento vamos a lamentar una violación”, alertó Valeria, que reside en la manzana 192.
En tanto, varias voces mencionaron sus sospechas respecto de los reiterados robos que se registran en la zona, los cuales serían perpetrados por los mismos menores que se drogan con alcohol y pastillas.
En diálogo con El Territorio, el padre de un chico de 13 años reconoció que su hijo se juntaba con aquellos y comenzó a fumar marihuana.
“A mi gurí le llevaron por el mal camino, pero nos dimos cuenta a tiempo y le llevamos a Posadas para que haga un tratamiento. Uno a veces trabaja todo el día y descuida a los hijos”, reflexionó.
Recordó el caso de otro chico del barrio, de sólo 12 años, cuyos padres decidieron encadenarlo para evitar la mala junta.
Conocedor del entorno, explicó que “los más grandes les dan vino con pastillas a los chicos y ahí empiezan a drogarse. Después les enseñan a robar y agarran el mal camino. Para colmo, la Policía poco y nada puede hacer porque son menores”.
Por otra parte, la semana pasada vecinos de barrio iniciaron la junta de firmas para un petitorio que será entregado en la Municipalidad solicitando el desmalezamiento de espacios verdes y terrenos baldíos que propician alimañas y también sirven de “aguantadero” para delincuentes.