La Justicia descartó que huesos hallados sean de Mario Golemba

Miércoles 20 de agosto de 2014
A la espera. | Los padres de Mario Golemba no pierden las esperanzas.
Finalmente se descartó que los huesos hallados hace cuatro meses por un cazador en la zona de Picada Libertad, sean de Mario Golemba. La confirmación llegó de parte de la Justicia y de los padres del joven, desaparecido desde hace casi siete años.
De todas formas, los médicos forenses extrajeron muestras de saliva a los padres de Mario, Antonio e Irma, cuyo ADN -a futuro- será cotejado con los cadáveres o restos óseos que circunstancialmente sean hallados en la provincia y catalogados como NN.
Las muestras genéticas fueron extraídas durante la mañana del último jueves y luego remitidas para su análisis a Buenos Aires, a fin de que se concrete en los laboratorios de la Facultad de Bioquímica de la Universidad de Buenos Aires (UBA).
Luego del trámite realizado en Posadas, la familia mostró cierta disconformidad al considerar que la pericia debía haberse concretado poco tiempo después de la desaparición de su hijo y no al cabo de más de seis años.
Pese a eso, en diálogo con El Territorio, Irma dijo que “la pericia supone una nueva instancia en la búsqueda de nuestro hijo, porque nosotros jamás dejamos de buscarlo y convivimos con la dolorosa experiencia de no saber ni donde está, ni que pasó con él”.
“En todos estos años que pasaron nunca bajamos los brazos y estamos decididos a hacer todo lo esté a nuestro alcance para que de una vez por todas, se aclare. Mario tiene que aparecer, como padres es muy necesario que sepamos la verdad” manifestó.
La hipótesis sobre el supuesto hallazgo de los restos óseos del joven desaparecido surgieron a partir de los datos aportados por un cazador, en abril pasado, ya que según su testimonio, coincidirían con las características físicas del joven.
Según un primer análisis forense de los huesos encontrados en una chacra abandonada en el Paraje Saracura de Picada Libertad, a unos 25 kilómetros de Aristóbulo del Valle, en una zona de montes a 20 kilómetros de la ruta nacional 14, cerca del arroyo Tamanduá, el deceso se habría producido hace alrededor de cinco años y se trataría de un hombre de contextura delgada y de entre 25 y 30 años de edad, datos que en ese momento abonaron la posibilidad de que se trate de Golemba.
Además de unos 60 huesos, incluido el cráneo, también se encontraron retazos de una camisa o remera roja, de un pantalón de jeans y un solo zapato. Las piezas fueron halladas a la intemperie y por ello presentaban un importante grado de deterioro, pero de todas formas la pericia pudo determinar que no pertenecen al joven.

Prohibido olvidar
Mario desapareció el 27 de marzo del 2008, cuando viajó desde su domicilio en Dos de Mayo hasta Oberá para consultar a un nutricionista. Hace poco más de cinco meses se cumplieron seis años del día en que nadie más lo vio.
Desde entonces su familia viene denunciando serias deficiencia en la investigación y la presunta responsabilidad policial en base a una serie de hechos registrados en la causa, como dos testigos que afirmaron que el día de su desaparición vieron a efectivos de la comisaría de Dos de Mayo ingresarlo esposado a la dependencia. Luego escucharon que lo golpeaban y finalmente lo subieron a un móvil hasta que nadie más lo vio.
“No queremos que se olviden de Mario, nuestra lucha es silenciosa pero no vamos a bajar los brazos aunque cada día que pasa nos sentimos débiles”, manifestó Irma y acto seguido pidió que “si alguien sabe algo, cualquier dato y aunque sea anónimo, nos informen”. 
El expediente judicial está a cargo de Horacio Alarcón, titular del Juzgado de Instrucción Dos de Oberá.